Nicaragua, como otras naciones del mundo, realiza un control rutinario del estatus migratorio de los extranjeros que residen en su territorio por diferentes motivos
| junio 26, 2013
Sólo en los primeros 25 días de junio la cifra de repatriados equivalió a 16 personas de distintas ciudadanías, precisó a la prensa el director en funciones de esa entidad, comandante de regimiento Martín Jarquín.
Nicaragua, como otras naciones del mundo, realiza un control rutinario del estatus migratorio de los extranjeros que residen en su territorio por diferentes motivos, explicó.
Precisó que a los extranjeros que se les vence su permanencia legal pueden hacer una renovación, pero si no lo hacen pueden ser deportados conforme lo establecen las leyes migratorias en este país.
El último ciudadano deportado en el período es de origen boliviano y responde al nombre de Carlos Alberto Ariñez, quien se encontraba en condición de ilegalidad, pues tenía más de 20 días de no renovar su estatus, puntualizó.
Jarquín detalló que hace una semana funcionarios de la institución invitaron al extranjero a actualizar sus documentos migratorios, pero este hizo caso omiso de la recomendación y hasta desafió a agentes que le reclamaron sus documentos en la calle.
Muchos ciudadanos nicaragüenses son deportados a diario de otros países, algunos por encontrarse en ilegalidad, otros por cometer delitos o por violentar a las autoridades, comentó el funcionario.
Las leyes migratorias del país establecen que un ciudadano extranjero tiene que presentarse a la Dirección de Migración y Extranjería 15 días antes de vencerse su permiso, para renovar su estatus, de no hacerlo cae en condición de ilegalidad, subrayó.
ls/ism