El presidente electo de Costa Rica, el derechista Rodrigo Chaves, consideró el lunes "indispensable" el acuerdo que firmó su país con el FMI por 1.778 millones de dólares, pero espera "mejorar" las metas, con planes de crecimiento económico más eficientes.
"El FMI no es una fuente de recursos para cerrar las necesidades de financiamiento del gobierno. Lo pensamos como un instrumento para darle confianza a la gente que nos tiene que prestar plata, que Costa Rica va a poder honrar sus deudas", explicó.
"Que el Fondo nos dé reconocimiento por medidas de política pública más ambiciosas respecto a la reactivación económica y a la responsabilidad fiscal", lo cual permitiría acceder a financiación de otros organismos, ejemplificó.
"No vamos a aflojar el compromiso sobre unas finanzas públicas responsables y sanas", sostuvo.
El FMI reactivó al cerrar marzo un programa crediticio acordado hace un año con Costa Rica, al aprobar un segundo desembolso de 284 millones de dólares y concederle más tiempo para aplicar las reformas acordadas.
El nuevo tramo entregado es parte de los 1.778 millones de dólares acordados el 1 de marzo de 2021 a 36 meses bajo la modalidad de facilidades extendidas (SAF), tras el compromiso de Costa Rica de realizar ajustes para reducir el déficit de sus finanzas públicas.
Costa Rica cerró 2021 con un déficit fiscal del 5,18% del Producto Interno Bruto (PIB), inferior al 8,03% registrado en 2020. La deuda pública, de más de 42.436 millones de dólares, superó el 70% del PIB.
Los desembolsos periódicos del FMI, "para efectos del presupuesto nacional (…) no nos van a arreglar el problema, son una gota de agua en un incendio", sostuvo Chaves, un economista que laboró por tres décadas en el Banco Mundial.
Uno de los requisitos para el desembolso del FMI fue la aprobación de una ley de empleo público, que reajusta pensiones y equipara salarios, con el fin de recortar el gasto. Chaves dijo que espera "tener la posibilidad de cambiarla", ya sea con una reforma o una reglamentación.
-Cuestionamientos-
Chaves se impuso el domingo en un balotaje frente al centrista José María Figueres, y gobernará por cuatro años, a partir del 8 de mayo, esta nación centroamericana afectada por una severa crisis económica.
Sus detractores le recuerdan sanciones por acoso sexual a dos subalternas, hechos ocurridos entre 2008 y 2013, cuando él era funcionario del Banco Mundial. Chaves asegura que fueron "bromas" que se malinterpretaron por "diferencias culturales".
"La verdad me sorprende. Para tener tantos votos tuvieron que votar muchas mujeres y me sorprende que no queramos avanzar porque para mí es un hombre machista. El país no quiere avanzar", dijo Ana Paula Rodríguez, de 18 años, en una calle del centro de San José.
Este lunes, Chaves dijo que no volverá a referirse al tema y descartó que el asunto afecte la imagen del país. "Garantizo que económicamente eso no significa ningún daño para Costa Rica", sostuvo.
Para sus electores, su experiencia como economista de un organismo internacional permitirá al país salir de la crisis económica.
Estoy "contento con el resultado, contento con el cambio y esperamos que este nuevo gobierno inicie con el pie derecho y que pueda cumplir con las expectativas del pueblo", consideró Javier Jiménez, de 63 años, residente en la capital.
-Relaciones con Nicaragua-
Chaves dijo estar dispuesto a retomar relaciones con Managua a nivel de embajadores, vínculo suspendido porque el gobierno actual de Costa Rica no reconoció las elecciones de noviembre en Nicaragua, donde Daniel Ortega fue electo para un cuarto mandato consecutivo.
Ortega, un exguerrillero en el poder desde 2007, logró su reelección con la mayoría de sus rivales y opositores en prisión, acusados de complotar para derrocar al gobierno con el apoyo de Washington.
"Mi inclinación es nombrar un embajador en Nicaragua. Si tenemos relaciones diplomáticas, no estamos en guerra", aseguró. "¿Quién dijo que conversar es hacer un endoso moral? Tenemos que mantener relaciones diplomáticas con todos nuestros vecinos", sostuvo.
Poco después consideró que esos temas los verá con su futuro canciller.