Todo empezó con el intento de saber por qué hay pacientes que no responden a las terapias actuales o lo hacen parcialmente
| febrero 14, 2014
El trabajo, que se realizó en ratones, ya dio lugar a una patente y el Conicet está en tratativas con una compañía internacional para hacer las pruebas clínicas en seres humanos, que permitirían llevar este descubrimiento a "la cama del paciente".
"Es el trabajo con mayor información que haya visto en cualquier grupo científico -dijo el ministro de Ciencia, Lino Barañao, durante el anuncio realizado ayer en el Ibyme-, y un aporte excepcional al conocimiento. Los científicos argentinos han sido siempre muy eficientes, pero una cosa es la eficiencia y otra la eficacia: lograr dar en el blanco. Como en el arte, en la ciencia hay artesanos y artistas. La mayoría somos artesanos."
Todo empezó con el intento de saber por qué hay pacientes que no responden a las terapias actuales o lo hacen parcialmente.