La noticia se conoce el mismo día en el que la ONU pide el cierre de este centro de detención
| mayo 19, 2006
El comandante Robert Durand, un portavoz esta polémica cárcel, los guardias habían entrado en una celda común para evitar que un detenido se ahorcase cuando fueron atacados por un número no determinado de detenidos con ventiladores, piezas de iluminación y otras armas rudimentarias. Se trata del primer incidente conocido de este tipo en la base de Guantánamo, en Cuba, donde Estados Unidos encarcela de forma indefinida a sospechosos de pertenecer a la red terrorista Al Qaeda o a los talibanes.
Los guardias lograron controlar a los rebeldes con el uso de una «fuerza mínima», según ha subrayado Durand, y los trasladaron de las instalaciones de seguridad media donde estaban recluidos a otras de máxima seguridad con el objetivo de impedir actos similares. El mismo día que se produjo el motin otros tres detenidos habían intentado ya suicidarse mediante la ingestión de fármacos que les habían sido recetados y que habían acumulado con el fin de tomar una dosis grande. El Pentágono no ha informado de si hubo heridos en el altercado, pero sí ha precisado que los cuatro reos que intentaron acabar con su vida fueron atendidos por los servicios médicos.
Entregados a Riad 15 saudíes
En total, según las cifras de los responsables de la prisión, se han producido 39 intentos de suicidio en Guantánamo desde que abrió sus puertas en enero de 2002. Al menos 12 de estos intentos han estado protagonizados por un único preso, Juma Mohammed al Dossary, un hombre de 32 años de Bahrein. La noticia de este amotinamiento se conoce el mismo día en el que el Comité de la ONU contra la Tortura ha exigido a Estados Unidos que cierre este centro de detención, que enjuicie a los detenidos o los deje libres y que cambie las técnicas de interrogatorio que equivalen a la tortura o a tratos inhumanos.
Actualmente quedan en el limbo jurídico de Guantánamo alrededor de 460 presos, según fuentes militares, y otros 192 han sido liberados, entre ellos 15 saudíes que han sido entregados hoy al Gobierno de este país del Golfo Pérsico. La mayoría de los retenidos, algunos de los cuales llevan más de cuatro años allí sin que se hayan presentado cargos contra ellos, fueron capturados por las fuerzas estadounidenses en Afganistán e Irak y Washington les considera «combatientes enemigos», sin derecho a recibir el amparo que las Convenciones de Ginebra otorgan a los presos de guerra.
Según el comandante Jeffery Gordon, portavoz del Pentágono, la entrega de los 15 saudíes de hoy reduce a 120 el número de detenidos que podrían ser liberados o trasladados a sus respectivos países.
Con información de: AGENCIAS – Washington