Juventus Turín y Milán, que derrotaron respectivamente al Palermo (2-1) y al Parma (2-3), prosiguen su pugna por el «scudetto», que queda ya a un solo punto de un conjunto turinés que tiene todo a su favor para cantar el «alirón» en la última jornada liguera italiana de fútbol.
| mayo 7, 2006
Juventus Turín y Milán, que derrotaron respectivamente al Palermo (2-1) y al Parma (2-3), prosiguen su pugna por el «scudetto», que queda ya a un solo punto de un conjunto turinés que tiene todo a su favor para cantar el «alirón» en la última jornada liguera italiana de fútbol.
La trigésima séptima (penúltima) jornada ha dejado más cerca del título a la «Vecchia Signora», pero ha estado marcada en todos los estadios por el escándalo de las «escuchas telefónicas» de la Fiscalía de Turín, que deja en entredicho a directivos juventinos y al mundo arbitral.
No era extraño, pues, prever que en todos los estadios aparecieran pancartas y cánticos de protesta contra los directivos juventinos implicados (pidiendo incluso la cárcel); salvo en el estadio turinés «Dell’Alpi», donde los hinchas locales les mostraron su apoyo.
El estadio «Dell’Alpi», en su último partido con la actual fisonomía (será reestructurado a partir del próximo mes y cambiará totalmente), no pudo celebrar con un inusual «casi lleno» el 29 «scudetto» del Juventus.
Los tres puntos de ventaja del Juventus sobre el Milán dejan al equipo turinés a un punto del título ya que, en caso de empate, el campeón sería el conjunto milanés de acuerdo con las normas aprobadas para esta campaña, que privilegian los enfrentamientos directos en caso de empate final (un triunfo milanista y una igualada).
Eso sí, el público juventino vio un notable partido, con un Juventus que dominó prácticamente durante una hora, donde llegaron los goles del checo Pavel Nedved (m.31) y el sueco Zlatan Ibrahimovic (m.51) -por fin se desbloqueó-, y una media hora final donde el Palermo, tras recortar su desventaja con un tanto de Godeas (m.62), asedió el área local y rozó la igualada.
El Palermo dispuso de dos buenísimas ocasiones, especialmente una de Makinwa (m.78), para empatar, falladas por errores garrafales en el remate; y unos minutos finales en los que el Juventus pedía insistentemente la hora. Al final, los tres puntos se quedaron en casa y en domingo, en la visita al Reggina, basta un punto.
El Milán, que pronto perdió por lesión a Andrey Shevchenko, ganó también apretadamente en Parma (2-3), pero sufrió mucho menos que el Juventus. Eso sí, el tanto que desbloqueó el empate sin goles inicial fue protestado y discutido por los locales, que no estimaron pena máxima la señalada por el árbitro por derribo del meta parmesano a Filippo Inzaghi.
El brasileño Kaká (m.28) transformó el penalti y dio mayor tranquilidad a un Milán que con su compatriota Marcos Cafú (m.44) hizo el 0-2 al borde del descanso. El Parma no se rindió y descontó con Corradi (m.53), pero duró poco la incertidumbre ya que un impresionante zambombazo del holandés Clarence Seedorf puso tres minutos después el 1-3.
A dos minutos de la conclusión, de nuevo Corradi acortó las distancias, pero ya era tarde para el «milagro». El Milán, ahora, espera un imprevisto «pinchazo» del Juventus en Reggio Emilia, sin olvidar que debe ganar en casa al Roma, que se juega la cuarta plaza.
Una cuarta plaza (última de acceso a la fase preliminar de la Liga de Campeones) que está, no obstante, más cerca del Fiorentina, que goleó en casa al Reggina (5-2), con dos goles de Luca Toni, que con 30 tantos lidera ampliamente la clasificación de máximos anotadores del campeonato.
El Roma, sin la esperada vuelta de su capitán Francesco Totti, pues un fuerte proceso gripal, con fiebre, le mantiene en cama desde ayer, sufrió para batir en casa al colista y desde hace varias jornadas descendido Treviso (1-0). Decidió un tanto del veterano Damiano Tommasi (m.35).
Ahora, el Fiorentina sigue con dos puntos de ventaja sobre el Roma ante una última jornada donde los toscanos visitan al Chievo Verona y parecen tenerlo más accesible que los romanos en Milán.
Precisamente el Chievo Verona, con su empate sin goles en Lecce y pese a jugar los veroneses todo el segundo tiempo en diez por expulsión de uno de sus jugadores pocos antes del descanso, logró ya un puesto en la próxima Copa de la UEFA.
Una meta que hace una semana había obtenido el Lazio, que este domingo goleó a domicilio al Ascoli (1-4).
El desastre sigue llevando el nombre del Inter de Milán, que cedió un empate (el primero casero en la actual campaña) ante el modesto Siena (1-1).
El conjunto interista, sin el brasileño Adriano, se adelantó con un tanto del argentino Julio Cruz (m.59), quien se convierte en el máximo realizador del Inter en la presente campaña; pero se vio igualado en el último instante con un gol de Gastaldello (m.93).
La anécdota de la jornada fue el debut en el Udinese del libio Said Gadaffi, que jugó los últimos diez minutos en el triunfo local sobre el Cagliari (2-0).
Completan la jornada el empate sin goles entre el Livorno y el Sampdoria y el triunfo del Empoli en Messina (1-2), donde los aficionados locales, descontentos con el descenso de su equipo, casi pusieron ellos el final del partido con lanzamientos de tomates.
