La ONU ha aprobado esta madrugada una resolución, la primera desde el inicio de la ofensiva israelí, que llama a Israel y Hamás a un alto el fuego inmediato después de 13 días de intensos combates.
| enero 9, 2009
La resolución es un avance diplomático en el conflicto, aunque por el momento no va a tener repercusiones prácticas: Las bombas siguen hoy mismo cayendo en Gaza y Hamás sigue disparando cohetes -sólo han parado las hostilidades durante la tregua diaria de tres horas pactada el miércoles.
De hecho, el gabinete de seguridad del primer ministro israelí, Ehud Olmert, se ha reunido para analizar el texto y debatir el camino a seguir. Al término de la reunión, el primer ministro ha emitido un comunicado en el que asegura que "el disparo de cohetes [de Hamás] esta misma mañana sólo viene a demostrar que la decisión de la ONU no se puede poner en práctica y que las organizaciones asesinas palestinas no se van a adherir". Antes de la cita, en la que también ha estado presentes la ministra de Exteriores, Tzipi Livni, y el de Defensa, Ehud Barak, la ministra ha esbozado la postura israelí: "Israel ha actuado, actúa y actuará sólo de acuerdo a sus consideraciones, las necesidades de seguridad de sus ciudadanos y su derecho a la propia defensa".
Por su parte, Hamás tampoco cree que deba sentirse afectada por la resolución. Un dirigente de la organización en Gaza, Ayman Taha, ha declarado que "pese a que somos el principal actor sobre el terreno en Gaza, no se nos ha consultado en relación a la resolución y no se ha tenido en cuenta nuestro punto de vista ni los intereses de nuestro pueblo. Por tanto, no nos sentimos aludidos por esta resolución".
La resolución, la 1860, jurídicamente vinculante, ha sido aprobada de madrugada, tras días de arduas negociaciones, por 14 de los 15 miembros del Consejo de Seguridad, con la abstención de EE UU. Hasta hoy había vetado todos los intentos de aprobar una resolución. Hoy, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ha aclarado que la abstención de su país no se debe de interpretar como un rechazo al contenido, que respaldan, sino como la apertura de un compás de espera en vista de que la mediación iniciada por las autoridades de El Cairo, con el concurso de Francia, aún no ha dado frutos. "La mediación que lleva a cabo Egipto, que no solo debe aplaudirse, sino también respaldar, será lo que al final nos conducirá a un alto el fuego duradero", ha dicho.
La resolución aprobada esta madrugada llama -no exige- a "un alto el fuego inmediato, duradero y respetado, que lleve a una retirada completa de las fuerzas israelíes de Gaza". El texto no exige una retirada inmediata de Israel, como pedían los países árabes, sino un alto el fuego que conduzca a esa retirada. Además, el texto no nombra a Hamás, lo cual es una pequeña victoria para Israel, ya que no coloca al movimiento islamista en pide de igualdad como contendiente.
Por otro lado, el documento expresa el apoyo de los miembros del Consejo al plan propuesto por Egipto para lograr una tregua duradera y sostenible. Hace "un llamamiento al suministro y distribución sin impedimentos por toda Gaza de asistencia humanitaria, lo que incluye alimentos, combustible y tratamiento médico". Además, insta a la comunidad internacional a intensificar sus esfuerzos para proporcionar mecanismos "para sostener la calma y un alto el fuego duradero, lo que incluye evitar el contrabando de armas y municiones y la reapertura de los puestos fronterizos".