Líbano, un pequeño país en el Mediterráneo, vecino de Siria, ha recibido a casi un millón de refugiados sirios, haciendo que su propia población creciera en un quinto
| febrero 24, 2014
BEIRUT / LIBANO: La actriz estadounidense Angelina Jolie, enviada especial de Naciones Unidas, hizo una visita sorpresa a Líbano para atraer la atención sobre los desafíos que enfrentan miles de niños sirios refugiados y subrayar el masivo desplazamiento que ha ocasionado el conflicto en Siria que está a punto de cumplir tres años.
Autoridades dijeron el lunes que en el viaje de tres días Jolie visitó a niños no acompañados que viven en el Valle Beka, en el este de Líbano, donde residen la mayoría de los refugiados sirios más pobres. La actriz es enviada especial de la Agencia de la ONU para los Refugiados. Los 3.500 niños que viven aquí son huérfanos o fueron separados de sus familias cuando huyeron a Líbano.
Ellos forman parte del casi un tercio de todos los sirios que han sido desplazados de sus hogares desde que comenzó la sublevación contra el presidente Bashar Assad en marzo de 2011. Unos 2,5 millones de sirios son refugiados; y otros 4,2 millones están desplazados dentro de Siria, según cálculos de la ONU. Las cifras representan casi un tercio de la población siria antes de la guerra.
"Encontrarme con estos niños fue una experiencia desgarradora", dijo Jolie en un comunicado emitido por la ONU. "Ellos han perdido a sus familias y su infancia fue secuestrada por la guerra. Son tan jóvenes y cargan sobre ellos el lastre de su realidad como si fueran adultos".
Líbano, un pequeño país en el Mediterráneo, vecino de Siria, ha recibido a casi un millón de refugiados sirios, haciendo que su propia población creciera en un quinto.
El concentrado número de refugiados ha abrumado la infraestructura libanesa, elevó las rentas e desbordó los sistemas de salud y educativos en todo el país. Los refugiados más pobres viven amontonados en casuchas hechas con viejos anuncios de vallas en tierras que rentan a campesinos en el Valle Beka; los refugios son de poca ayuda en los crudos inviernos y calurosos veranos.
Los padres de miles de niños sirios los han sacado de las escuelas debido a que no pueden pagar las modestas cuotas escolares libanesas, o porque los necesitan para trabajar, a menudo como lustrabotas y limpiadores de automóviles.
Durante su visita, Jolie pidió a la comunidad internacional garantizar la aplicación de una reciente medida de la ONU que pide que la asistencia humanitaria llegue a los civiles sirios.
