La OCDE recortó ligeramente su previsión para el crecimiento mundial en 2021 y pidió acelerar la distribución de vacunas, en un momento en que la pandemia del covid-19 retoma fuerza con la irrupción de una nueva variante.
La economía mundial podría crecer 5,6% este año, anticipó en sus proyecciones la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), es decir un retroceso de 0,1 puntos en comparación sus anteriores previsiones hechas en septiembre.
El organismo señaló la existencia de "realidades económicas muy diferentes" entre distintas regiones y estimó que "la recuperación seguirá siendo precaria" mientras no se distribuyan vacunas en todo el mundo.
En tanto, las proyecciones para la actividad en 2022 siguen acorde a sus anteriores pronósticos de una expansión de 4,5%.
Para la zona euro, la OCDE proyectó un leve recorte de su previsión de crecimiento para 2021 a 5,2% y para Estados Unidos, la OCDE volvió a revisar sus pronósticos, estimando un crecimiento de 5,6% para este año y de 3,7% para el próximo.
Para Brasil, la OCDE recortó en 0,2 puntos sus previsiones para 2021, augurando un crecimiento de 5%, con un panorama también más sombrío que en su anterior informe para el próximo año, con una expansión proyectada de 1,4%, es decir 0,9 pp menos.
"Han surgido desequilibrios llamativos", destacó el organismo con sede en París.
Para la OCDE, estas brechas son el reflejo de las desigualdades en los sistemas de salud, las políticas públicas, las dificultades de trabajadores de algunos sectores y de un alza de los precios que se mantiene durante más tiempo de lo que se había proyectado.
Este informe no contiene estimaciones sobre el surgimiento de la variante ómicron, detectada hace unos pocos días y cuyas consecuencias para la economía mundial todavía son inciertas.