En el inicio del curso escolar, el presidente Hugo Chávez ha dejado clara su primera lección: ser rico es malo, sólo el socialismo los hará libres.
| septiembre 18, 2009
Aún así, el militar retirado no se da por vencido e insiste en que su "revolución bolivariana" logrará inculcar valores socialistas a una sociedad petrolera, donde los centros comerciales están abarrotados incluso en épocas de crisis y el consumismo desterró hace décadas la cultura del ahorro.
El jueves, millones de niños de entre 4 y 17 años debían incorporarse a clases en medio de la polémica generada por una nueva ley de educación que otorga al Estado mayor control sobre escuelas, mientras algunos sectores críticos llamaban a boicotear la legislación.
"Vamos a darle una pita (abucheo) a los escuálidos: ¡Uhhh! Fracasaron (en sabotear el inicio de las clases)", dijo Chávez, con su característica camisa roja, a un grupo de niños de 13 años en la inauguración el miércoles de una escuela en Naiguatá, en la costa caribeña.
"Los ricos no quieren que los hijos de los pobres, los hijos del pueblo, tengan laboratorio, tengan computadoras. Porque los ricos quieren que sus hijos, así como ellos explotaron a los pobres, los sigan explotando en el mundo. Ser rico es malo", concluyó, ante la mirada atenta de los jóvenes.
La oposición denuncia que el nuevo instrumento legal tiene como fin ideologizar a los jóvenes, mientras el Gobierno asegura que nada impedirá que se implante un nuevo estilo de educación "liberadora, bolivariana y revolucionaria".
Chávez, el más cercano aliado de la Cuba comunista, ha puesto su sueño de ver nacer al "hombre nuevo" en la nueva generación, que asegura no están contaminadas por el "capitalismo salvaje" que envenenó a los venezolanos por la tradicional influencia de Estados Unidos en el país.
"Ustedes (los jóvenes) son los libertadores y libertadoras y los creadores y creadoras de la patria nueva, la patria socialista ¡Métanse eso aquí en el corazón y aquí en la mente!", les exhortó el líder venezolano.