Pidieron el respeto a las garantías fundamentales establecidas en los Instrumentos Internacionales de Derechos Humanos. Con lo cual hacemos un llamado firme a parar la represión.
| agosto 19, 2022
Un llamado a las autoridades de Nicaragua para que cesen los actos de represión en contra de los miembros de la Iglesia Católica, realizó este vierenes 19 de agosto la Presidencia del Consejo Centroamericano de Procuradores y Procuradoras de Derechos Humanos, encabezada por el defensor del Pueblo panameño, Eduardo Leblanc González, quien expresó su profunda preocupación frente a los hechos en violación a la Convención Americana de Derechos Humanos.
El llamado cobra fuerza luego de conocerse que el gobierno nicaragüense ordenó la detención del sacerdote Rolando Álvarez, quien se opone al régimen del presidente Daniel Ortega, quien se estableció en el poder desde 2007.
El Consejo Centroamericano de Procuradores y Procuradoras de Derechos Humanos, ya había mostrado su preocupación, el pasado 4 de agosto mediante el Comunicado, donde exhortó al Gobierno de Nicaragua reconsiderar las acciones ejercidas contra los medios de comunicaci6n, asi como de los miembros de Ia Iglesia Católica, toda vez que los Estados deben promover, respetar y garantizar el derecho de todas las personas a expresar sus opiniones o ideas por cualquier medio y sin miedo a ser perseguidos, sancionados o estigmatizados, tal como lo establece la Convención Americana de Derechos Humanos.
Además reportaron que han tenido conocimiento que las acciones contra los representantes de la Iglesia Católica en Nicaragua no han cesado y se han ejercido acciones de persecución, donde los medios de comunicación a nivel internacional hacen referencia de agresiones contra sacerdotes, profanaciones a templos, ataques, asedios, entre otras, lo cual constituye graves violaciones a los Derechos Humanos.
"Desde la Presidencia del Consejo Centroamericano de Procuradores y Procuradoras de Derechos Humanos, hacemos un llamado al cese de las acciones autoritarias que el Gobierno de Nicaragua ejerce sobre los representantes de la Iglesia Catélica, creando con ello, una situacién de incertidumbre en la población".
En ese sentido, exigieron la liberacién de todos los representantes de la Iglesia Católica que han sido detenidos durante las acciones de persecución, procurando el respeto a las garantías fundamentales establecidas en los Instrumentos Internacionales de Derechos Humanos. Con lo cual hacemos un llamado firme a parar la represión.
