México (EFE) – El presidente de México, Felipe Calderón, anunció hoy el envío de una iniciativa de ley al Congreso para restablecer la cadena perpetua, que ahora no está contemplada en el Código Penal, contra los secuestradores que dañen a sus víctimas o que sean o hayan sido policías.
| agosto 7, 2008
El mandatario mexicano señaló que su Gobierno y la sociedad mexicana se encuentran indignadas ante el caso del menor Fernando Martí, secuestrado y asesinado por una banda integrada por policías judiciales capitalinos en activo.
"Con esta reforma mi Gobierno propone elevar la pena máxima de prisión y que en algunas modalidades del secuestro imponga como máxima la prisión vitalicia", precisó el gobernante en un mensaje a los medios en la residencia presidencial de Los Pinos.
El mandatario dijo que, asimismo, enviará una solicitud a la Comisión Permanente del Congreso mexicano para que se retome el dictamen de una iniciativa de reforma judicial que presentó en marzo del año pasado.
En su mensaje, Calderón precisó que su iniciativa de reforma propone cadena perpetua, tanto para los secuestradores que sean o hayan sido integrantes de instituciones de seguridad pública como para los que secuestren a un menor de edad e intenten llevárselo a otro país con fines de lucro.
También para los que lesionen, mutilen, torturen y lastimen gravemente o priven de la vida a sus víctimas, así como para quienes plagien a personas discapacitadas.
"No podemos permitir que el crimen organizado haga presa del miedo y del terror a nuestra nación. Una verdadera justicia exige que el castigo corresponda a la gravedad del delito y del daño social causado", apuntó.
Calderón expresó su confianza de que el Congreso mexicano aprobará dicha ley por encima de cualquier diferencia política "asumiendo en toda su magnitud el sentir de una sociedad agraviada por la violencia".
Asimismo, recordó que la prioridad de su Gobierno ha sido el combate a la delincuencia y contra la inseguridad, aunque admitió que es necesario continuar con la capacitación y depuración de los cuerpos policiales con el fin de que cumplan con "los elevados estándares de confianza y honradez".
"Debemos purgar las organizaciones policiales para acabar con los infiltrados del crimen, debemos poner un alto definitivo al contubernio entre delincuentes y autoridades", puntualizó.
Calderón convocó a todos los niveles de gobierno para que la lucha contra la delincuencia sea asumida como una acción de Estado.
La medida gubernamental se produce en medio de una fuerte controversia por el secuestro y asesinato de Fernando Martí, hijo del empresario Alejandro Martí.
El menor, de 14 años de edad, fue plagiado en junio pasado cuando se trasladaba a su escuela en una camioneta, en una acción en la que al parecer estuvieron involucrados varios agentes judiciales.