MIAMI, EU (AP). -La lluvia dejó de caer hoy miércoles en el nordeste de Oklahoma y algunos ríos dejaron de crecer, pero muchos evacuados no han podido regresar a sus viviendas inundadas y los expertos advirtieron que las condiciones podrían empeorar.
| julio 4, 2007
MIAMI, EU (AP). -La lluvia dejó de caer hoy miércoles en el nordeste de Oklahoma y algunos ríos dejaron de crecer, pero muchos evacuados no han podido regresar a sus viviendas inundadas y los expertos advirtieron que las condiciones podrían empeorar.
Las advertencias de inundaciones seguían en efecto para el río Neosho, cuyo desborde obligó a la evacuación de cientos de residentes, bloqueó el acceso a caminos importantes y anegó edificios académicos y residentes en una universidad estatal.
El río llegó a su máximo nivel de 8.9 metros (29.2 pies) el miércoles temprano y no se anticipa que volverá a caer por debajo de su nivel de desborde de 4.6 metros (15 pies) hasta el domingo por la mañana, dijo Chuck Hodges, un meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Tulsa.
Hasta el lunes corrían veinte días consecutivos que llovía en Oklahoma City.
El río Caney seguía creciendo al norte de Tulsa y amenazaba hoy miércoles las casas al nordeste de Collinsville.
