BARCELONA: La confirmación de los primeros contagios del coronavirus de Wuhan fuera de China en los últimos días ha habido casos en Alemania, Japón, Vietnam y Taiwán y Singapur han llevado al director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus, a convocar para mañana una nueva reunión del comité de emergencia que estudiará si decretar la alerta internacional.
La progresión del virus en los últimos días, sobre todo en algunos países y muy en especial la transmisión de persona a persona, es algo que nos preocupa mucho, ha afirmado Tedros la tarde de este miércoles en Ginebra. El máximo mandatario de la OMS acaba de llegar de una misión a China en la que se ha reunido con las máximas autoridades del gigante asiático, entre ellas el presidente, Xi Jinping.
La de mañana será la tercera reunión que celebra el comité en dos semanas, ha sido fijada a las 13.30 en Ginebra y a las 19.30 está prevista una rueda de prensa en la que se ofrecerán sus conclusiones. Aunque la convocatoria ya incluye un aviso: "La rueda de prensa podría ser retrasada si la reunión no acaba a la hora prevista". Es la muestra de lo reñidas que han sido los dos encuentros anteriores, en los que los 16 miembros quedaron divididos por la mitad entre los partidarios de declarar la emergencia y quienes se resisten a ello.
Tedros y el director del Programa de Emergencias Sanitarias del organismo, Michael Ryan quien también ha viajado a China han tenido muy buenas palabras para China. "Han puesto la salud de los ciudadanos por delante de cualquier otra consideración, incluso la económica", ha afirmado Ryan. "Que solo haya 68 casos confirmados fuera del país [en realidad ya son 71] es gracias a China", ha seguido Tedros, que ha destacado que las medidas "sin precedentes" adoptadas por las autoridades "deben seguir".
Sobre los primeros contagios registrados fuera de China, Ryan ha destacado que “este es un momento clave en el que creemos que estas cadenas de transmisión aún pueden ser interrumpidas”.
Ryan ha definido los cuatro niveles en los que se está articulando la lucha contra el virus. El primero, en Wuhan, para intervenir en el epicentro de la epidemia. El segundo, en el resto de provincias chinas, para contener el avance del virus en ellas. El tercero tiene como escenario los 15 países que han registrado casos.
El objetivo en ellos es evitar que se abran cadenas de transmisión e interrumpirlas lo antes posible si esto ocurre. El último eslabón lo forman el resto de países del planeta, algunos con otros problemas sanitarios ya abiertos. “Estamos trabajando especialmente con ellos” para evitar la llegada del virus, ha afirmado Ryan
Oriol Güell: elpais.com