“Nuestros custodios, por un absurdo de una ley, tienen temor de disparar al que se está evadiendo porque el que queda preso es el custodio” si resulta herido el fugado.
| julio 10, 2009
El nuevo ministro panameño de Gobierno y Justicia, José Raúl Mulino, ordenó el jueves a los guardias de las cárceles que disparen sobre los presos “ante el menor intento de fuga”, algo que dificulta la legislación vigente. “Les he dado la instrucción (a los custodios) que al que se está evadiendo que disparen. Tan sencillo como eso. Que disparen en el menor intento de fuga porque no se atreven a disparar y (los presos) se fugan”, dijo Mulino.
Aseguró que el nuevo gobierno de Ricardo Martinelli intentará reformar la legislación para evitar que los guardias tengan miedo a disparar a los presos que intenten escapar.
Aseguró que el nuevo gobierno de Ricardo Martinelli intentará reformar la legislación para evitar que los guardias tengan miedo a disparar a los presos que intenten escapar.
“Nuestros custodios, por un absurdo de una ley, tienen temor de disparar al que se está evadiendo porque el que queda preso es el custodio” si resulta herido el fugado.
Sin embargo, al visitar una cárcel este jueves Mulino aseguró que había sentido vergüenza por la situación en la que vivían los reclusos, situación que comparó con “la puerta de un infierno”. La orden de disparar en caso de intento de fuga fue objeto de críticas.
“Es una aberración jurídica pretender que un custodio tenga la facultad de disparar a cada reo que se asome a la cerca”, dijo a la AFP Javier Justiniani, presidente de la Fundación de Apoyo al detenido y ex presidiario.
“El uso de armas está prohibido y el uso de la fuerza letal con arma solamente lo permite la ley en el caso que haya un grave indicio de atentar contra la vida humana”, expresó Justiniani. En Panamá los reclusos superan los 10.000 y son frecuentes las fugas, en algunos casos masivas.
