Los rebeldes prorrusos derriban otro avión militar ucranio en Lugansk

Un avión de caza ucraniano ha sido derribado este domingo por los separatistas en la región de Lugansk, horas antes de que se celebre una reunión en Berlín ente los ministros de Asuntos Exteriores de Rusia y Ucrania, y justo cuando se cumple un mes del siniestro del vuelo MH17 de Malaysia Airlines en el que murieron 298 personas. Todavía no se ha determinado la causa de la tragedia pero se sospecha que pudo ser derribado por un misil disparado desde territorio prorruso.

El MiG-29 fue abatido hoy después de haberles ‘hecho sufrir pérdidas’, señaló a la agencia France Presse, Leonid Matioukhine, portavoz militar ucraniano. El piloto del caza consiguió eyectarse y se encuentra a salvo, según explicó. Los milicianos separatistas han derribado al menos dos aviones de transporte militar ucraniano y reivindicado el derribo de varios cazas más en casos rara vez confirmados por Kiev.

La tensión en Lugansk no parece remitir pese a que las autoridades fronterizas y aduaneras de Rusia y Ucrania han alcanzado un acuerdo para inspeccionar un primer cargamento del convoy de ayuda humanitaria rusa que espera en la frontera para ser enviado a esa región Ucrania, según ha informado Cruz Roja.

‘Responsables de fronteras y de aduanas de Rusia y Ucrania han acordado inspeccionar un primer grupo de camiones del convoy ruso. Nosotros observaremos’, ha informado el Comité Internacional de la Cruz Roja a través de su cuenta en Twitter.

El convoy ruso, formado por 262 camiones, espera desde el pasado 12 de agosto la autorización para entrar en Ucrania. Los camiones transportan unas 2.000 toneladas de alimentos, medicinas y bienes de primera necesidad, según Moscú.

Sin embargo, Kiev sospechaba de la posible introducción de material bélico ruso destinado a las milicias prorrusas, por lo que desde entonces se negocia el posible patrocinio de Cruz Roja y la inspección del cargamento. Personal de Cruz Roja ya ha realizado inspecciones aleatorias de cargamento