Panamá (EFE) – Dicen que la justicia es ciega y parece que algunos ladrones también, como los que en Panamá intentaron robar el auto del propio presidente de la Corte Suprema de Justicia, Harley James Mitchell, en la misma entrada de su casa.
| octubre 14, 2008
El delito hubiera sido otro si, perpetrado el robo, Mitchell estuviera ya en el auto que lo traslada a diario a su despacho, situación que no se dio sólo por una diferencia de minutos.
Una nota de prensa de la Corte informó del incidente, ya bajo investigación, que descarta la intención de secuestro.
El magistrado, que detenta el cargo desde el 9 de enero de este año, esperaba en su residencia, situada en el barrio capitalino de Hato Pintado, el auto de su propiedad que conduce el chofer de la Corte asignado a su servicio.
Mientras el conductor esperaba a Mitchell a la entrada de la casa uno de los ladrones le asaltó con una pistola y le pidió las llaves del auto, una camioneta todoterreno.
"Estamos ante un hecho puntual, no ante un ataque contra el magistrado, ya que últimamente hay muchos intentos de robo de este tipo de camionetas en Panamá", dijo a Efe el secretario de comunicación del órgano judicial, Aurelio Martínez.
El robo se evitó cuando intervino el escolta permanente de Mitchell, quien también estaba armado y provocó la huida de los dos asaltantes, a los que no se ha podido detener hasta el momento.
El magistrado, que ha continuado su jornada laboral con normalidad, estaba en el patio de su casa cuando se registró el incidente, del que no se percató hasta después de superada la situación.