NACIONES UNIDAS (Reuters) – El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó el martes el despliegue en Darfur de un contingente formado por hasta 26.000 soldados y policías en un esfuerzo para proteger a los civiles y frenar la violencia en esta enorme provincia desértica del oeste de Sudán.
| julio 31, 2007
Con un coste superior a los 2.000 millones de dólares en su primer año, la operación combinada de la ONU y la Unión Africana (UA) espera acabar con la violencia en Darfur, donde más de 2,1 millones de personas han tenido que dejar sus hogares y unas 200.000 han muerto en los últimos cuatro años.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó la resolución de «histórica» y animó a los estados miembros a ofrecer tropas «capaces» lo más rápidamente posible para UNAMID, como ha sido bautizada la misión.
La resolución 1769 invoca el Capítulo 7 de la Carta de la ONU, según la cual puede autorizar el uso de la fuerza en casos de defensa propia, para asegurar el libre desplazamiento de los cooperantes y para proteger a los civiles que sean atacados.
Pero sin embargo, tras ser suavizada en varias ocasiones, ya no permite al nuevo contingente incautarse y disponer de armas ilegales, sino que sólo podrán vigilarlas.
También ha desaparecido la amenaza a futuras sanciones, aunque el primer ministro británico advirtió el martes de que «si cualquier parte bloquea el progreso y siguen las muertes, yo y otros redoblaremos nuestros esfuerzos para imponer más sanciones».
«El plan para Darfur de ahora en adelante es lograr un alto el fuego, incluyendo el final de los ataques aéreos; impulsar las conversaciones de paz (…) y si se establece la paz, ofrecer el comienzo de inversiones en recuperación y reconstrucción», agregó durante una visita a la ONU.