Ghana desplegó su juego más rápido y agresivo en la segunda parte, se fueron al descanso con un 2-1 y aguantaron toda la segunda parte el acoso americano, que también podía haberse clasificado en caso de ganar.

| junio 22, 2006
Ghana afrontaba este partido con mucha motivación, teniendo la oportunidad de vengar las eliminaciones de Costa de Marfil, Togo y Angola, y con ganar le bastaba para pasar a octavos.
Estados Unidos le bastaba el mismo resultado para obtener el mismo premio, pero los ghaneses, portentos físicos en estado puro, no se dejaron doblegar y aguantaron toda la segunda parte el 2-1 conseguido en la primera. Al final, Ghana ganó y los africanos se medirán nada más ni nada menos que a Brasail en octavos de final.
La clave del partido estuvo en el minuto 21 de partido cuando Reina, capitán del equipo estadounidense y con tres mundiales a sus espaldas, se entretiene con el balón cerca de su área, y Haminu Draman aprovecha y se lo roba, encara a Keller y le bate por bajo y exterior.
Ghana intenta desde entonces tranquilizar un poco el partido, xo siendo conscientes de que no son un equipo hecho para mantener el balón, así que no tratan de complicarse demasiado. Estados Unidos, por su parte, sólo tiene una opción, irse al ataque con todo o despedirse del Mundial. Surge durante unos minutos un juego raro, sin iniciativa, en el que los africanos querían que pasase el tiempo y los yanquis no sabían muy bien que hacer. Así hasta los últimos 10 minutos de la primera parte.
Siete minutos de lo más intensos
Vienen entonces 7 minutos de auténtico infarto, en donde cambia totalmente el partido. En el 40 el capitán americano Reina, supuestamente lesionado en el gol ghanés, es sustituido por Olsen. Parecía entonces que Estados Unidos perdía muchas de sus opciones de remontar, pero en el minuto 42 Beasley roba el balón en el medio del campo, corre la banda y centra para que Dempsey marque un bonito gol de volea con la diestra. Estados Unidos estaba vivo, y la bastaba un gol para estar en octavos. Pero 4 minutos más tarde, en el 46, el alemán Markus Merk quiso echar una mano a los africanos y pita penalty del central Onyewu en un balón aéreo. Penalty injusto, que no fue, pero que el jugador de la Juve Appiah anota de manera impecable, imparable, no podía desaprovecharlo.
De este modo, se preveía una segunda parte apasionante, en la que la victoria de Italia sobre República Checa le daba tanto a Ghana como a Estados Unidos la oportunidad de estar en octavos, bastaba con ganar este partido, 45 minutos le separaban de la gloria.
Al principio de la segunda, la experiencia de los nortemericanos se hizo notar, y salieron al partido mejor, controlando el balón y creando algo de peligro al portero ganhés, pero en una rápida contra típica de los africanos, están a punto de marcar, pero Keller no se deja. El cambio en el descanso de Boateng, delantero, por Addo, delantero también, demostraba que Ghana no pensaba especular con el resultado, no es su estilo, no son europeos.
No es su estilo, pero si a los europeos les funciona es por algo, debieron de pensar los jugadores ghaneses. Y es que los estadounidenses desplegaron durante la primera media hora de esta segunda parte el mejor futbol que se les ha visto hacer en el Mundial. El lateral Lewis entraba por la banda izquierda cuando y como quería, y los americanos veían cerca su gol de la esperanza, tanto que en una de esas Mc Bride remató al palo.
Mientras, los africanos se dedicaban a jugar al contragolpe, con balones largos, e incluso gracias a su velocidad pudieron marcar el tercero en más de una ocasión.
Pero al final nada, ni para unos ni para otros. Y es que los estadounidenses son un equipo muy vacío, sin apoyo, sin historia, nadie confía ni espera nada de ellos, y así es muy dificil ganar en un Mundial.
Sin embargo Ghana es todo lo contrario, el único equipo africano que consigue meterse en octavos, con el apoyo de todo un continente en sus espaldas, y eso se nota.
De este modo, los ghaneses, auténtica revelación del torneo, se cuelan en octavos, y les ha tocado el premio gordo, el que ningún jugador quiere pero los aficcionados desean ver, Brasil.
Ganaron hoy de un modo feo, jugando toda la segunda parte defendiéndose como si fuesen italianos, y ganando por un penalty injusto, pero, ¿quién se acordará de eso el martes 27 cuando jueguen contra los pentacampeones del Mundo?.