Frenéticos esfuerzos tienen lugar para evitar que colapse la búsqueda de una solución negociada al conflicto sirio, luego de que se retirara de la mesa la principal agrupación de la oposición.
| enero 20, 2014
La debacle comenzó cuando el principal partido de la oposición siria, el Consejo Nacional, decidió no viajar a las negociaciones si Irán, país que fue invitado por el secretario general de las Naciones Unidas a un encuentro previo a la conferencia, no se comprometía públicamente a apoyar un gobierno de transición que excluya al presidente Bashar al-Asad, tradicional aliado de Teherán.
Irán dijo que aceptaría la invitación del secretario general Ban Ki-moon, pero sin condiciones previas.
Un vocero de la ONU dijo que Ban estaba desilusionado ante el hecho de que la nación islámica no había formulado este compromiso público, a pesar de garantías que se habían manifestado en privado.
Diplomáticos de naciones occidentales, incluyendo Estados Unidos, han reclamado que la ONU retire su invitación si Irán no apoya el establecimiento de un gobierno interino con absolutos poderes ejecutivos.